20 abril 2008

Suspendido Extremúsika 2008

La lluvia, el viento y el frío pudieron al final con Extremúsika 2008. El macrofestival rockero tuvo que ser suspendido en la mañana de ayer por "motivos de seguridad", dejando a más de 20.000 espectadores sin poder disfrutar de las 30 bandas previstas en el cartel del sábado, día de la clausura.

A Vallekas Producciones, organizadora del evento, se comprometió ayer a reembolsar un tercio del precio de los abonos dentro de unos diez días. Las devoluciones se realizarán en los puntos de venta anticipada y para los que las adquirieron en taquilla, se está buscando un centro institucional para hacerlo.

Tras la segunda jornada del viernes, en la que la continuidad del festival corrió serio peligro por el mal tiempo, la suspensión comenzó a gestarse en la madrugada del sábado cuando la lluvia volvió a arreciar sobre el recinto ferial. No paró de caer agua desde las tres de la mañana, lo que provocó que los escenarios instalados en el ferial y el hípico quedasen inutilizados para la música y los espectadores.


La decisión final se produjo poco antes de las doce de la mañana tras la reunión mantenida por el comité de crisis en la jefatura de la policía local. Ante la imposibilidad de garantizar la seguridad de los asistentes y de los músicos por las malas condiciones del recinto, todos los conciertos fueron cancelados.

En una comparecencia de urgencia ante los medios de comunicación, Angel Romero, promotor de la cita musical, asumió que las adversas condiciones climatológicas habían obligado a tomar la decisión de dar por terminado el festival. "Al final nos han vencido los elementos. Se ha podido luchar contra ellos hasta que nos han vencido", señaló, desvelando que las intensas lluvias de la madrugada habían provocado "daños irreparables en el equipo de sonido".

Aunque la culpa de la suspensión fue de la lluvia, lo cierto es que la falta de preparación del recinto ferial para acoger conciertos con climatología adversa también tuvo algo que ver. Así lo destacó el máximo responsable de la promotora, Angel Romero, en su valoración de la situación ayer. "Ha sido muy complicado, siempre valorando la seguridad y la posibilidad de las actuaciones", aseguró.

Romero enumeró las carencias: "El terreno no drena, no hay un sistema de alcantarillado, los pozos se desbordan...". En su opinión, si no hubiera sido por Conyser y la arena que se esparció por el terreno los días previos al festival y el viernes, ni siquiera se hubiera podido llegar a celebrar dos días. Por ello, consideró que, de celebrarse en años sucesivos, habría que buscar otras instalaciones o mejorar estas, porque el riesgo de lluvia "existirá siempre".

Por su parte la concejala de Festejos, María José Casado, estimó que el recinto ferial está acondicionado para los usos que tiene y consideró que si se ha suspendido el festival no ha sido por la infraestructura del hípico sino por "una situación meteorológica excepcional y contra los elementos no podemos luchar". La edil, en declaraciones a EL PERIODICO, apuntó que "estaba preparado" pero que "la tierra no ha podido drenar la cantidad de agua caída en muy pocas horas y el viento ha sido muy fuerte". Recordó, además, que el equipo de gobierno lleva trabajando en la mejora del recinto desde que accedió al gobierno.


Extremúsika 2009 está en el aire. El propio Angel Romero, su promotor, resaltó el peligro que suponía para un festival de esta magnitud una suspensión como a la que se vieron abocados ayer. "No sé cómo va a influir en una próxima edición, no sé si influirá en que no haya más ediciones", manifestó durante su comparecencia ante los medios de comunicación.

El empresario musical recordó el caso del festival Espárrago Rock que no se llegó a recuperar de su suspensión, igualmente por la lluvia, en el año 2000 y acabó muriendo. Las pérdidas económicas a las que tuvo que enfrentarse entonces la organización por la devolución de entradas y el pago a los artistas se arrastraron en las siguientes ediciones, hasta que finalmente se canceló en el 2005.

DAÑOS Precisamente Angel Romero se refirió a estos daños "morales" y "económicos superirreparables" para poner en duda la continuidad del festival cacereño. Reconoció que existen los seguros, pero estos miran todo con lupa y "pagan lo que pagan". Aun así, no quiso ser dramático ni catastrofista. "Tampoco estoy diciendo que sea un fin de Extremúsika, sino que se va a valorar. No sabemos si habrá más ediciones, pero tampoco podemos asegurar que no las haya", explicó.

Aseguró, eso sí, que en los dos días que sí ha podido celebrarse el Extremúsika, "nos lo hemos pasado muy bien" y agradeció a todas las personas que "como una gran familia" habían colaborado en que esos dos días fueran posibles, destacando sobre todo la ayuda prestada por Conyser, los dos cuerpos policiales y servicios asistenciales. "Hemos forzado la máquina dos días con el riesgo que eso ha conllevado a todos los niveles, el tercero no ha podido ser", se lamentó.
Romero recordó también que seguirá trabajando para Cáceres en otro proyectos, como el próximo concierto de El Canto del Loco previsto para el 30 de mayo.


Noticia extraída de: "El Periódico Extremadura" 20 de Abril del 2008

No hay comentarios.: