El concejal cree que la operación urbanística debe reportar más beneficios a la ciudad Si no se mejora el convenio, dejaría el acta de concejal este mes
El PSOE cree que el Corte Inglés debe cambiar de sitio.
Aunque las discrepancias internas del concejal Rodríguez Cancho tienen un trayectoria más amplia y se refieren a varias actuaciones y materias, será la operación urbanística de El Corte Inglés, en concreto, la que determine dentro de unas semanas si acabará dimitiendo o no, como miembro del equipo municipal de Gobierno y como concejal. Así lo reconoció ayer a este periódico Manuel Rodríguez Cancho, responsable de Turismo y de Patrimonio, quien dijo de manera categórica que si el alcalde pretende aprobar en octubre el convenio del solar de las Carmelitas en las condiciones actuales, sin exigir más a los promotores como compensación por los grandes beneficios que obtendrán, él se marchará a su casa y entregará el acta de concejal. Mientras, el alcalde dice que se muestra «respetuoso» con la decisión que pueda tomar el edil.«Si el alcalde quiere llevar el convenio para aprobarlo en el mes de octubre, presentaré mi dimisión en el pleno de este mismo mes de septiembre», afirmó para añadir a continuación que no tiene ningún problema en abandonar sus tareas municipales: «me voy a mi casa y tan a gusto». De esta manera, Rodríguez Cancho matiza el alcance político de la crisis política que ocasionaría al PP y al Gobierno de Saponi ya que en ningún momento se plantea permanecer como concejal independiente, al margen del PP, como el caso de Felipe Vela.Preguntado al respecto, se muestra igualmente claro: «no pretendo entorpecer nada», dice refiriéndose a la capacidad de Gobierno del alcalde, una capacidad que ya de por sí se encuentra mermada desde el pasado año por la salida del concejal Vela del equipo del PP. «Yo no tengo responsabilidad de que el equipo del PP sea de 12 concejales», afirma para referirse a la situación actual de su grupo, sin mayoría absoluta por la marcha de Vela. En su caso, según insiste, no colaborará a incrementar la brecha y la pérdida de mayoría ya que si decide dimitir lo hará dejando el acta de concejal: «entregará el acta de concejal y de diputado en la Diputación provincial».
Causa
Preguntado por la causa de esa posible dimisión, reconoce que se trata de la operación del Colegio de las Carmelitas, que incluye la construcción de El Corte Inglés, además del nuevo colegio y de un bloque de pisos y locales comerciales. Sobre el conjunto del nuevo Plan de Urbanismo matiza que hay actuaciones y previsiones «con las que discrepo», pero advierte de que el plan no es un documento definitivo y que por ello sigue trabajando en él.Sin embargo, la actuación urbanística de El Corte Inglés es más inminente y se pretende aprobar al margen del nuevo Plan General Municipal (PGM), como modificación puntual del actual. A este respecto, Rodríguez Cancho quiere dejar bien claro que está a favor de que se permita la implantación de El Corte Inglés en la ciudad, incluso en el solar de las Carmelitas, pero nunca sin exigir las debidas compensaciones a sus promotores, por entender que van a conseguir importantes beneficios con la recalificación del terreno.«Yo defiendo que hay que conseguir las máximas plusvalías posibles para Cáceres», indica y añade que si El Corte Inglés «ha hecho cuentas y le interesa instalarse en Cáceres para obtener beneficios en la ciudad, es legítimo que yo me preocupe para que haya las máximas plusvalías para la ciudad y si no es así discreparé».Y esta discrepancia se producirá en forma de dimisión este mismo mes, en el pleno ordinario del día 21, si el alcalde no se plantea exigir más compensaciones en un nuevo convenio urbanístico con las partes interesadas en la operación. Como se recordará, la empresa intermediaria, Estudios Urbanísticos y Medioambientales, ofrece en ese convenio una compensación a la ciudad cifrada en 2,5 millones de euros, una cantidad que Rodríguez Cancho califica de «chocolate del loro». Sería partidario de aumentar esa compensación.
Vela
Esta misma discrepancia es compartida por el concejal Felipe Vela, quien ratificó ayer a este periódico su disposición a no votar a favor del convenio y de la operación urbanística si no hay más compensaciones para Cáceres, en la línea de Rodríguez Cancho.De esta manera, aunque se marche este último y sea sustituido por otro concejal del PP, el grupo no conseguiría, sin Vela, los 13 votos necesarios para aprobar la modificación urbanística del solar de las Carmelitas, que necesita mayoría absoluta. En cambio, sobre el conjunto del PGM, Vela reconoce que se plantea votar con el grupo del PP. En cambio, Rodríguez Cancho, si no se marcha, sí podría plantearse no votar a favor del nuevo PGM ya que mantiene discrepancias con algunas materias, como la catalogación de la vieja cárcel como edificio singular. Él es partidario de su derribo y de cumplir un viejo convenio con el Ministerio de Justicia por el que se preveía hacer una urbanización.El concejal también se mostró este año muy crítico con el presupuesto de su departamento, el de Turismo, por creer que le falta presupuesto y llegó a anunciar en algún pleno que no votaría con su grupo, por ejemplo en lo relativo a reconocimientos extrajudiciales de créditos.En todo caso, insiste en que no se plantea ser un «obstáculo» para el equipo de Gobierno: «el PP y el alcalde saben que no necesito quedarme si soy un obstáculo y no entraré en el juego de ser concejal independiente. Yo soy militante del PP y si tengo que retirarme a casa, me voy, y si sigo jamás renunciaré a mis responsabilidades».Por su parte, el alcalde afirmó ayer que en caso de producirse la dimisión de Cancho, no «afectará al trabajo municipal» y añadió que es un «asunto privado mío con él que habrá que solucionar el plano privado».
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